Se seleccionaron 15 cerdas de cada granja (135 en total) que parieron el mismo día, y 4 lechones de cada camada (60 por granja, 540 en total). Durante el estudio hubo un 25% de mortalidad (92% entre el destete y el engorde) y en más de la mitad se detectó PCV-2.
Los autores encontraron una relación directa entre la viremia de las cerdas y la mortalidad de los lechones. Por otro lado, se detectó una mayor mortalidad entre los lechones que procedían de cerdas con títulos bajos (o nulos) frente a PCV-2. Estas observaciones sugieren que el “efecto camada” de la incidencia del PMWS puede ser parcial o totalmente debido al estado inmunitario de las cerdas. Se concluye que todas las medidas que mejoren la inmunidad de las cerdas van a reducir el impacto del PMWS en la mortalidad de los lechones.
Por otro lado, el estudio también evaluaba distintas vías de excreción del PVC-2, se usaron hisopos para tener muestras nasales, bronquiales, tonsilares, fecales y urinarias. El virus se excreta por todas estas rutas y se correlacionó positivamente la carga viral en estas cinco rutas con las lesiones detectadas y con la concentración plasmática.
M Calsamiglia. Studies concerning PMWS rapid diagnostic tools and epidemiology. 2004. Proceedings of the 18th IPVS Congress(2):807